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Medicina Intensiva - Gripe aviar: lo que un intensivista debe conocer

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Medicina Intensiva

versión impresa ISSN 0210-5691

Med. Intensiva v.32 n.4 Madrid mayo 2008

 

REVISIÓN

 

Gripe aviar: lo que un intensivista debe conocer

Bird flu: what the intensivist must know

 

 

S. Casillasa, S. Herrero Fernándezb, J. Varonc

aUniversidad Autónoma de Baja California. México
bServicio de Medicina Intensiva y Unidad Coronaria. Fundación Medicina Intensiva-Gijón. Hospital de Cabueñes. Gijón. Asturias. España.
cThe University of Texas Health Science Center of Houston. St. Luke's Episcopal Hospital. The University of Texas Medical Branch at Galveston and Houston. Texas. EE. UU.

Dirección para correspondencia

 

 


RESUMEN

En el siglo pasado, la humanidad ha hecho frente a tres de las mayores pandemias de infecciones por el virus de la gripe. La primera fue en 1918, y causó una cantidad significativa de muertes. Éste ha sido también capaz de cruzar la barrera de la especie y afectar a los mamíferos y, lo más preocupante, a los seres humanos. Desde entonces se han publicado varios brotes en el sudeste de Asia. Una gran cantidad de pacientes presenta un curso severo que desarrolla neumonía y disfunción, que implica al hígado, los riñones, el cerebro y los pulmones.
Puesto que el virus carece de control regulador de la división genética, experimenta mutaciones constantes que conducen a nuevos subtipos y a nuevas cepas. Los únicos fármacos que han mostrado cierta protección son oseltamivir y zanamivir. Es crucial desarrollar vacunas eficaces y no costosas para prevenir la extensión del virus y la infección, no solamente en seres humanos sino también en aves.

Palabras clave: gripe aviar, fallo respiratorio agudo, virus H5N1, neuraminidasa, oseltamivir.


ABSTRACT

In the last century, humankind has faced 3 major pandemics of influenza virus infections. The first one occurred in 1918 and caused a significant amount of deaths. It was also capable of crossing over species barrier and affecting mammals, and most worrisome, humans. Since then several outbreaks have been reported in the Southeast of Asia. Many patients with the flu-like illness have a severe course and the patient develops pneumonia and in some cases multiorgan failure involving liver, kidneys, brain and lungs.
Since the virus lacks regulatory control of genetic division it undergoes constant mutations leading to new subtypes and, sometimes, new strains. The only drugs that have shown some protection are oseltamivir and zanamivir. It is crucial to develop effective and non-expensive vaccines to prevent the virus spread and infection not only in humans but in birds too.

Key words: aviar flu, acute respiratory failure, H5N1 virus, neuroaminidase, oseltamivir.


 

Introducción

Una de las infecciones respiratorias más comunes es causada por el virus de la gripe1. La gripe ha estado presente durante siglos y la relación cercana con ella ha dado lugar a epidemias anuales con patrones estables demográficos y de morbimortalidad2. Cada 20-30 años aparece una nueva pandemia, con elevada mortalidad3,4. Todas las epidemias importantes de la gripe en seres humanos han sido causadas por los virus de la gripe de origen aviar3. El brote más importante fue el brote español de la gripe aviar en 19185.

En 1997 se identificaron en Hong-Kong varios casos de infección del tracto respiratorio superior en seres humanos6. El progreso de la infección fue refractario a muchas formas de aproximación terapéutica y usualmente era letal. El agente causal fue un virus, sorprendentemente un virus de la gripe, y asombrosamente era un novedoso virus de la gripe aviar (gripe aviar altamente patógena H5N1), el cual desempeñaba el papel principal en esta ocasión6. Para controlar esta infección los criadores rurales sacrificaron más de 100 millones de pájaros7.

Tras este episodio se han presentado varios brotes en muchos países de Asia suroriental, tales como China, Vietnam, Camboya, Tailandia, Laos, Corea del sur, Japón, Hong-Kong e Indonesia7,8. Con fecha del 29 de noviembre de 2006, se han identificado 258 casos de la gripe aviar H5N1 en seres humanos y 154 personas han muerto9.

 

Reconocimiento histórico de la gripe y de la gripe aviar

Los virus de la gripe son propensos a variaciones genéticas continuas o rápidas10. El reservorio principal de los virus de la gripe son las especies de pájaros acuáticos, tales como patos o gansos. La asociación virus-pájaros es antigua y de ahí que el pájaro esté perfectamente adaptado a la presencia parásita del virus. Tras introducirse en un nuevo huésped, el virus, especialmente los subtipos H5 y H7, experimenta un inicio rápido de cambios y se desarrolla en nuevas isoformas o virus nuevos que sean más patógenos7,11.

La gripe fue inicialmente identificada en Italia en 187812. En 1918 Europa fue el escenario principal para una de las pandemias más terribles conocida por los hombres, la gripe española, también conocida como «la madre de las pandemias»5. La voracidad devastadora de este virus afectó a casi un tercio de la población humana, es decir, a 500 millones de personas, matando alrededor de 100 millones de personas5,13. Esta pandemia provocó más muertes que la Primera y la Segunda Guerra Mundial juntas14 y fue causada por el subtipo H1N1 del virus de la gripe A.

Este virus continúa siendo mortal a pesar de los muchos esfuerzos que se han llevado a cabo para ordenar el genoma viral aislado en 199515. Un hecho interesante es que afectó a seres humanos y a cerdos si-multáneamente16,17, lo que condujo a pensar que el cerdo es un portador intermedio de ambas gripes de los tipos aviar y humana. Mató al 50% de los adultos de 15 a 34 años que lo contrajeron. La tasa de mortalidad fue del 2,5% en Estados Unidos18.

Los estudios virológicos actuales han probado que este virus era enteramente nuevo para los seres humanos y se ha sugerido que su origen pudo haber sido aviar19. Las epidemias de 1957, 1968 y 1977 estaban todas relacionadas directamente con esa primera epidemia y consistían en los virus que experimentaron la deriva genética/antigénica: H1N1, H2N2 o el reajuste H3N2, y todos ellos se han encontrado desde entonces en pájaros en Asia20.

Los primeros casos de la infección aviar altamente patógena de la gripe H5N1 en seres humanos fueron documentados por primera vez en Hong-Kong, cuando apareció un brote de 18 casos6. El inicio de la enfermedad era rápido y el curso clínico era severo: alcanzaba altas cotas de mortalidad (el 33%) y desarrolló neumonía en casi todos estos pacientes y en algunos casos disfunción múltiple de órganos6.

 

Epidemiología

Un 20% de los niños y un 5% de los adultos tienen infección sintomática de la gripe humana cada año21. En una estación media en los Estados Unidos, la gripe causa más de 30.000 muertes y más de 100.000 hospitalizaciones22,23.

El primer brote de virus aviar de la gripe H5N1 en seres humanos se desarrolló en Hong-Kong6. Se asoció con la enfermedad humana la exposición a las aves de corral vivas una semana antes del inicio de la enfermedad24,25. La vigilancia serológica demostró la evidencia de infecciones asintomáticas después del contacto en casos humanos26.

Desde 2003 un virus aviar altamente patógeno (gripe A H5N1) ha explotado entre las aves de corral, distribuyéndose por lo menos por 9 países de Asia (Camboya, China, Indonesia, Japón, Laos, Malasia, Corea del Sur, Tailandia y Vietnam)8.

Antes de 2004 en Asia suroriental se documentaron muchos informes de la gripe aviar (H5N1), principalmente en Vietnam, Tailandia e Indonesia. Por enero de 2004, el virus aviar altamente patógeno de la gripe (HPAI) del subtipo H5N1 fue primero confirmado en aves de corral y en seres humanos en Tailandia27. Los estudios a principios de 2004 demostraron que los patos fueron los principales portadores silenciosos del virus de HPAI28,29. En 2003 en Tailandia se detectaron los primeros casos en humanos del virus H5N130.

Desde 2004 se han documentado 254 casos de infección humana por el virus aviar de la gripe H5N1 en Asia y han muerto 150 pacientes, conduciendo a un índice de mortalidad de casi el 60%. La mayoría de los casos humanos ocurrieron en Vietnam e Indonesia9. Aunque la transmisión directa del virus de pollos a los seres humanos es preocupante, aún es mayor que la transmisión entre humanos pueda comenzar a ocurrir. La epidemia todavía está en curso. La transmisión de humano a humano de la gripe A (H5N1) se ha sugerido en varios grupos y en un caso de transmisión evidente de niño a madre31. Aunque el virus H5N1 está apuntando a la población humana, la infección entre humanos no ha sido demostrada consistentemente y hay muchos informes probados de que esta infección no se ve transmitida entre humanos32,33. La controversia viene con algunos otros estudios que sugieren que el contacto cercano entre personas pueda conducir a la infección aviar de la gripe31,34.

Más de 258 casos de infección aviar de la gripe H5N1 en seres humanos por todo el mundo han sido documentados por la Organización Mundial de la Salud a partir de 2003 hasta el 29 de noviembre de 20069 (tabla 1 y fig. 1).

 

Virología

Los virus A, B y C de la gripe son los tres géneros principales de la familia Orthomyxoviridae10,35. Estos tres tipos se clasifican en función de las proteínas de su núcleo (NP y M)34. La gripe A infecta mamíferos y pájaros mientras que la B y la C se restringen a los seres humanos36,37.

La gripe A tiene dos tipos de glucoproteínas de la superficie de su membrana que determinan el subtipo: hemaglutinina y neuraminidasa. Hay 16 tipos de hemaglutininas y 9 tipos de neuraminidasas38. La hemaglutinina es el blanco viral principal de la inmunidad humoral protectora, ya que neutraliza los anticuerpos; y está también a cargo de la conexión viral a la membrana de la célula y ayuda a su entrada en las células huésped, vinculando a los receptores del ácido siálico en la superficie39. La glucocoproteína hemaglutinina es producida por un precursor, el HA0, el cual requiere división post traductora (posttranslational cleavage) de las proteasas del huésped principal40. La división del precursor HA0 en virus de HPAI es catalizada solamente por la tripsina y proteasas similares a la tripsina (trypsin-like) del huésped principal, tales como la ubicua furina y la proteasa relacionada clara-cell, limitando al virus a las localizaciones donde se encuentran estas proteasas, a saber, a las zonas respiratorias e intestinales41.

Los virus humanos atan preferencialmente al ácido siálico unidos a galactosa por acoplamientos «alfa 2-6», que son el tipo principal encontrado en las células epiteliales de la zona respiratoria humana39. Los virus aviares tienen acoplamientos «alfa 2-3», principalmente en el intestino, por lo tanto la transmisión horizontal entre pájaros se hace por materia fecal, mientras que la transmisión horizontal en seres humanos es proporcionada por la exposición de la zona respiratoria y de la mucosa asociada, tal como la oral, nasal y conjuntival a las partículas virales42.

La neuraminidasa, por otra parte, es una proteína tetramérica que facilita la extensión de viriones en el huésped principal, cortando los residuos del ácido siálico que están presentes en los mucopolisacáridos de la superficie celular y facilitando la conexión de la hemaglutinina a los receptores celulares43.

El genoma de la gripe A consiste de 8 únicos segmentos inmóviles de ARN trenzado apilados en el lípido que envuelve a los viriones10. Los 8 segmentos del ARN del genoma del virus de la gripe A codifican 11 proteínas, que son: cuatro proteínas polimerasas (PB1, PB2, PA, PB1-F2), una proteína de la nucleocápside, una hemaglutinina, una neuraminidasa, dos proteínas de la matriz (M1, M2) y dos proteínas no estructurales (NS1, NS2)42. Un solo segmento del ARN codifica dos proteínas de la matriz: M1 y M2. La M1 está situada debajo de la doble capa del lípido del virus y es interna. La M2 funciona como un canal iónico que domina una pequeña superficie extracelular y es el objetivo de los fármacos antivíricos amantidina y rimantidina10,44. Otro segmento del ARN consiste en el gen no estructural (NS), que codifica NS-1 y la proteína nuclear exportadora (NEP). La NS-1 ayuda a las partículas virales neutralizando interferones (IFN). La NEP está implicada en la exportación nuclear del ARN y del ensamblaje viral. Los cuatro segmentos restantes del ARN codifican simples proteínas internas, a saber la PB1, la PB2, la polimerasa PA implicada en la transcripción gen viral y la nucleoproteína (NP) que encapsida los segmentos genómicos ARN. La PBF2 conduce a la apoptosis de la célula y afecta principalmente a las mitocondrias45.

 

¿Enmascarado o cambiando las caras?

Es curioso que un defecto evolutivo en la réplica genómica del control de calidad de los virus por el complejo ARN-dependiente «virus-codificado» de la polimerasa del ARN sea relativamente propenso a errores y a estas mutaciones en el genoma ARN, que son la mayor fuente de variaciones genéticas por la deriva antigénica46. Cuando existe cierta cantidad acumulada de mutaciones genéticas de menor importancia y el virus adquiere nuevas características superficiales, tales como una alteración en la estructura de la hemaglutinina, decimos que el virus está «desenfundando una máscara», puesto que el cambio principal estaba simplemente en la superficie; llamamos a ese proceso de deriva antigénica. Este mecanismo permite a los virus reinfectar previamente a huéspedes expuestos y evadir un «sistema inmune ingenuo» que lo reconoció previamente. Este fenómeno se proyecta como epidemias anuales, puesto que el virus usa una «nueva máscara» cada año5,12.

 

Mecanismo de extensión

Las rutas principales de transmisión de la gripe humana son la inhalación de gotitas y de núcleos infecciosos de la gotita, el contacto directo y, quizás, el contacto indirecto (vómito), con auto-inoculación sobre la zona respiratoria superior o la mucosa conjuntival47,48.

Los virus de la gripe han encontrado su principal reservorio en las aves acuáticas salvajes (por ejemplo, patos y gansos)14,49. Parece que los pájaros están muy bien adaptados a la presencia permanente del virus debido al hecho de que la coexistencia no es patológica en la mayoría de los casos y no conduce a ninguna manifestación de la enfermedad o da muestras de infección49,50. El intestino aviar es el órgano que tienen la mayoría de los receptores específicos para las partículas del virus aviar (ácido siálico-alfa 2-3)42. Estos receptores en el intestino permiten una réplica viral continua y separarse junto con la materia fecal producida. Por lo tanto, el ambiente, principalmente los humedales, lagos y ríos, donde es predominante la presencia de patos, gansos y otras aves acuáticas, facilita la exposición a las partículas virales36. La migración de pájaros salvajes propaga la infección entre las especies de pájaros y la extensión de nuevos tipos de virus a los terrenos de la ingenuidad inmunológica, en donde se produce la infección rápida de pájaros y la manifestación de la enfermedad51-53. La migración ha diseminado la infección H5N1 entreAsia, Europa y África (figs. 1 y 2). Los criadores rurales, y el personal que trabaja con las aves de corral y sus desechos, son las poblaciones humanas principalmente expuestas54.

Otra característica especial en la gripe aviar es que tiene receptores en otras especies mamíferas, como en los cerdos16,17,42. Esto es muy preocupante, ya que el cerdo es muy común en la dieta humana y se encuentra habitualmente en contacto cercano a las poblaciones humanas55.

La transmisión entre humanos de la gripe aviar altamente patógena es la preocupación principal. Aunque existen varios estudios entre trabajadores sanitarios expuestos a pacientes infectados26,33,34,56,57, la mayoría de los casos humanos señalados se correlacionan directamente con el contacto cercano a las aves de corral enfermas o que mueren25.

 

Patogénesis

El tropismo tisular y la respuesta inmunológica exagerada al virus desempeñan los dos papeles prindcipales en la configuración de la enfermedad58. Los virus altamente patógenos de la gripe, tales como el H5N1, tienen capacidad de replicarse pobremente en tejidos enriquecidos con proteasas en el organismo59. Esto permite que el virus produzca copias de sí mismo extensamente en diferentes partes del cuerpo, propiciando una reacción generalizada.

Tras la entrada del virus de la gripe aviar H5N1, a través de la vía respiratoria superior, se acciona la inmunorrespuesta (no específica) natural y la detección inmediata del virus se hace a través de los receptores tipo toll-like que se encuentran en los neutrófilos y los macrófagos residentes en el epitelio del pulmón y de la zona respiratoria60,61.

De forma temprana, durante el primer contacto con el virus se libera una gran cantidad de citoquinas proinflamatorias para luchar contra el agresor (figs. 3 y 4).

Entre éstas, el IFN tipo I, el factor de necrosis tu-moral alfa y la interleuquina 12 son las sustancias más importantes implicadas en la activación aguda de la inmunorrespuesta natural62,63. Esta fase es constante con el cuadro de inicio agudo de la enfermedad respiratoria, por ejemplo, neumonía severa seguida por fallo multiorgánico en algunos pacientes infectados con gripe aviar HPAI H5N1 que comienzan previamente con enfermedad gripal31,64. Tras esta cascada de acontecimientos, los fagocitos engullen las partículas virales y actúan como presentadores del antígeno a las células-B situadas principalmente en el bazo, los nódulos linfáticos y el hígado, y éstas, alternadamente, son activadas para producir el IFN tipo I que media la inmunidad antiviral65.

Durante el brote de HPAI H5N1 en Hong-Kong en 19976, las manifestaciones clínicas eran de inicio rápido de estado gripal que conducía a la enfermedad respiratoria severa y finalmente a la disfunción multiorgánica, revelando el hecho de que este virus tiene no solamente la capacidad de infectar el pulmón o el tejido intestinal, sino que puede provocar una infección diseminada a cambio (por ejemplo, tejido linfoide, hígado y bazo)64,66.

La inmunorrespuesta secundaria es una respuesta específica dirigida contra las proteínas virales de la capa y las proteínas internas67. Está dirigida principalmente por la producción de células B de anticuerpos específicos y por efectos citotóxicos de los linfocitos CD-8 con regulación adicional desde los linfocitos CD-4 helper68,69.

La reinfección viral provocada por el contacto con el virus vía mucosa nasal dará lugar inmediatamente a la réplica viral y a la lisis del epitelio de la vía aérea, de forma que más partículas virales estarán disponibles para el reconocimiento por linfocitos CD-8 citotóxicos, los cuales proliferarán y emigrarán al epitelio infectado y a los linfáticos de la zona respiratoria, generalmente una semana después de que se haya hecho el contacto70-73. Esto, alternamente, permite que los linfocitos CD-8 liberen citoquinas antivirales en los lugares infectados. Dos mediadores especiales en la lisis de células infectadas son liberados por los linfocitos CD-8, cuyos gránulos contienen perforinas y granzimas67,74.

Los epítopes (partes de una molécula que son reconocidas por el sistema inmune) virales múltiples y el antígeno que presentan las células en los sitios infectados son los que están a cargo de dar la orden de ataque para desbloquear los gránulos de los linfocitos CD-8, permitiendo a las células T citotóxicas actuar en lugares específicos, entre ellos el tracto respiratorio superior y el tejido pulmonar, conduciendo a una reacción localizada75,76.

 

Manifestaciones clínicas

El curso clínico de la gripe fue documentado por primera vez en un niño que murió tras sufrir el síndrome de Reye en Hong-Kong en 199777. La gripe como enfermedad requiere de fiebre aguda (temperatura > 38,0° C), así como tos o garganta dolorida en ausencia de otro diagnóstico28. El dolor de cabeza, las mialgias, el malestar general y la rinitis también suelen estar presentes64. Los pacientes que sufren la gripe humana generalmente manifiestan conjuntivitis e infección superior de la zona respiratoria, pero a diferencia de ella, la gripe aviar no presenta generalmente la afectación conjuntival78.

La mayoría de los casos humanos reportados habían evidenciado la exposición a la especie aviar que manifestaba la enfermedad, por ejemplo aves de corral enfermas79. La fiebre apareció en casi todos los pacientes así como la sintomatología respiratoria baja, consistente principalmente en tos y disnea que progresaron seguidamente a un franco distrés respiratorio80,81.

La gripe como enfermedad puede ser indistinguible de otras enfermedades respiratorias y febriles82. En 1997, en Hong-Kong, hasta el 61% desarrolló neumonía83, pero también se han descrito diarreas, vómitos y dolor abdominal, así como dolor pleurítico y epistaxis84. En 1997 la infección afectó a la mayoría de las personas entre 9,5 y 22 años25 (tabla 2).

En algunas series publicadas, el fallo respiratorio y el síndrome de distrés respiratorio agudo (SDRA) estaba presente en más del 75% de los pacientes30.

También se han descrito casos atípicos: en Tailandia una mujer de 39 años de edad presentó durante una semana síntomas gastrointestinales tales como náuseas, vómitos y diarrea con una carencia completa de manifestaciones respiratorias85.

También se han descrito la disfunción neurológica y casos de encefalitis; en Vietnam, en 2004, una niña de 9 años se presentó en el hospital con fiebre, diarrea y somnolencia. No se señaló ningún síntoma respiratorio en el hospital. Al principio se pensó que la paciente tenía una sepsis gastrointestinal o una encefalitis aguda, pero posteriormente murió de encefalitis86. Dos semanas más tarde su hermano de 4 años desarrolló fiebre, cefalea, vómitos y diarrea. Cinco días después falleció de encefalitis. Durante su estancia en el hospital el H5N1 fue aislado en las heces, garganta, suero y líquido cerebroespinal86.

En 2004, en Tailandia, Chotpitayasunondh et al realizaron un estudio clínico que incluyó a 12 pacientes. El estudio reveló que la población más afectada era la que tenía una edad por debajo de los 14 años y que el 100% de ellos presentaba fiebre, tos y disnea; el 75% tenía dolor de garganta y un 42% presentaba diarrea30.

El desarrollo de múltiples complicaciones se relacionó con la respuesta inflamatoria, que era común en diversas series. La complicación respiratoria más habitual considerada en estos pacientes es el inicio rápido de neumonía, el SDRA y el derrame pleural. El fallo renal fue otro de los encuentros patológicos con elevación de la creatinina y el nitrógeno ureico en sangre. Las aminotransferasas están incrementadas con función anormal de las pruebas hepáticas que estaban presentes en el 52% de los pacientes25,30,64 (tabla 3).

 

Resultados histológicos y de imagen

Los principales resultados patológicos en las muestras de tejido tomadas de los pacientes que murieron por gripe aviar H5N1 fueron publicados por Chotpitayasunondh et al30. Estos resultados eran constantes y destacaban la presencia de daño alveolar difuso, formación de membranas hialinas y áreas hemorrágicas. No se observaron cuerpos virales de inclusión30.

Uiprasertkul et al87 encontraron en una autopsia que el pulmón mostró proliferación y daño alveolar, neumonía intersticial y bronquiolitis. Los neumocitos indicaron hiperplasia marcada. También se encontró que el paciente tenía infección concomitante por hongos, específicamente aspergillosis. Los órganos linfoides, como los nódulos linfáticos, el bazo y la médula, mostraron hiperplasia histiocítica leve87.

Experimentos realizados en gatos por Kuiken et al mostraban que el pulmón de un cat fed, infectado por un polluelo inoculado con el virus H5N1, tenía focos múltiples de consolidación, que consistían histológicamente en daño alveolar difuso, con la expresión de gripe en tejidos inflamados y demostrados por inmunohistoquímica88. Ungchusak et al publican un caso en el que se sugiere la transmisión entre seres humanos. En ese estudio la madre de un paciente con gripe aviar confirmada (H5N1) permaneció en su cabecera durante varios días y tras ello desarrolló fiebre y cefaleas; fue ingresada en el hospital con disnea severa y leucopenia y falleció tres días más tarde. En la autopsia, el análisis immunohistoquímico de la pieza reveló neumonitis intersticial y sólo una célula epitelial contenía cuerpos intranucleares de la gripe aviar H5N134.

Alrededor del 70% de los pacientes infectados desarrollará manifestaciones respiratorias y la mayoría de ellos tendría una imagen representativa de la enfermedad si se le realizase una simple radiografía de tórax25. Casi todos los pacientes tienen cambios radiográficos que incluyen infiltrados difusos, multifocales o parcheados, infiltrados intersticiales y segmentos de consolidación lobular con broncograma aéreo64. En un estudio, las anormalidades radiográficas estaban presentes una media de 7 días después del inicio de la fiebre (rango: 3-17)25.

 

Detección

Según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, la muestra óptima para la detección del virus de la gripe A es un aspirado nasofaríngeo obtenido en el plazo de tres días desde el inicio de los síntomas. Hay tres métodos principales para detectar partículas o la infección viral en un individuo determinado89: la detección del antígeno, el cultivo del virus y el análisis de la reacción en cadena de la polimerasa (en tiempo real)89 (tablas 4, 5 y 6).

Woo et al encontraron en 1997 que el diagnóstico rápido de infecciones respiratorias virales es rentable y reduce el tiempo de hospitalización90. El diagnóstico rápido es de confianza y útil en el seguimiento médico de pacientes afectados por la gripe aviar H5N1.

 

Tratamiento. Experiencias actuales con antivirales

Los antivirales más potentes y eficaces son el zanamivir y el oseltamivir. Estos fármacos son eficaces frente al amplio espectro de la gripe A y de los virus B, e incluyen los 9 subtipos de la neuraminidasa en la especie aviar91.

Según lo publicado por Nicholson, los amantadanes (como amantadine y rimantadine) son eficaces para el tratamiento de la infección aguda de la gripe A si la terapia antivírica se comienza en el plazo de las primeras 24 horas tras el inicio de la enfermedad, reduciendo la fiebre y los síntomas92.

Los inhibidores de la neuraminidasa son útiles en el tratamiento y la quimioprofilaxis en la gripe aviar y su eficacia está probada con la reducción de síntomas y complicaciones, aunque es menos potencial frente a cepas resistentes emergentes y para combatir la gripe que emerge por cepas aviares, por ejemplo la H5 y la H9, para las cuales la vacunación es inasequible93.

Desafortunadamente, según lo recomendado por Balicer et al, la cantidad de medicación eficaz para una pandemia es muy pequeña y se recomienda comenzar un almacenaje de oseltamivir para contraatacar un brote pandémico posible e inminente de la gripe aviar altamente patógena H5N194. Ejemplos de países que están almacenando ya oseltamivir son Finlandia95 e Inglaterra96.

 

Prevención y vacunas

Las vacunas existentes corresponden a tres grupos principales: virus entero, productos divididos y antígenos de superficie36. Se obtiene una eficacia protectora del 70-95% en adultos jóvenes sanos cuando hay un buen encuentro antigénico entre la vacuna y las cepas que circulan97, una reducción del 19-63% en la hospitalización para la neumonía y la gripe, del 1739% en todas las condiciones respiratorias y del 2775% en todas las causas de mortalidad36.

El hecho de que los virus de la gripe tengan la capacidad de infectar los huevos de gallinas es utilizado ventajosamente para la producción de partículas virales en un ambiente controlado. Desafortunadamente, tanto los subtipos H5 como H7 son letales para alguna especie aviar; de hecho, el cultivo viral de H5 y H7 en embriones del pollo es casi imposible debido a la letalidad en éstos98.

Después del brote de 1997 de la gripe aviar H5N1 en Hong-Kong, Reino Unido y Holanda prepararon vacunas99. Ambos atenuados, H5N1 y H9N2, son virus recombinantes adaptados al frío que han sido generados para no ser patógenos en modelos de mamíferos y de pollos100.

La vacuna adaptada al frío, consistente en virus recombinantes, se entrega con una dosis más grande de partículas virales al tejido linfoide bronquial que la vacuna inactivada, dando por resultado una respuesta inmunológica más compleja y expandida91. Esto incluye anticuerpo sérico (inmunoglobulina [Ig] G, IgA, IgM) elevado o similar tanto a la hemaglutinina y la neuraminidasa, más los anticuerpos neutralizados y la respuesta secretora mucosa local de IgA mayor que la vacuna parenteral91,101, y una reducción de la cantidad y de la frecuencia del vertido viral en comparación con la vacuna inactivada tras la infección34.

Declaración de conflicto de intereses

Los autores no divulgan ningún conflicto de interés en la preparación de este manuscrito.

 

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Dirección para correspondencia:
Dr. J. Varon.
2219 Dorrington.
77030 Houston. Texas. EE. UU.
Correo electrónico: joseph.varon@uth.tmc.edu

Manuscrito aceptado el 28-V-2007.